* Proceso adiabático: Un proceso adiabático es aquel en el que no se intercambia calor entre el sistema (el aire en este caso) y sus alrededores.
* Aire ascendente: A medida que aumenta el aire, se mueve a regiones de presión atmosférica inferior.
* Expansión: La presión más baja permite que las moléculas de aire se extienda, lo que hace que el aire se expandiera.
* enfriamiento: Esta expansión funciona contra el aire circundante, que requiere energía. Como no se intercambia calor (proceso adiabático), la energía para la expansión proviene de la energía interna del aire mismo. Esto da como resultado una disminución de la temperatura, lo que lleva a enfriar.
Puntos clave:
* Tasa de lapso adiabática seca: La velocidad a la que el aire seco se enfría a medida que aumenta es de aproximadamente 10 ° C por 1000 metros (5.5 ° F por 1000 pies). Esta es una tasa simplificada, y la tasa real puede variar ligeramente dependiendo de factores como la humedad.
* Tasa de lapso adiabática húmeda: Cuando el aire se satura con vapor de agua, la velocidad de enfriamiento se ralentiza debido a la liberación de calor latente de la condensación. Esto se llama la tasa de lapso adiabática húmeda, que típicamente es de alrededor de 6 ° C por 1000 metros (3.3 ° F por 1000 pies).
¿Por qué es esto importante?
Comprender el enfriamiento adiabático del aire creciente es fundamental para la meteorología. Explica:
* Formación en la nube: A medida que el aire se enfría debido a la expansión, puede alcanzar su punto de rocío, lo que hace que el vapor de agua se condense y forme nubes.
* Patrones meteorológicos: El aumento del aire puede conducir a tormentas eléctricas, lluvia y otros fenómenos climáticos.
* Cambio climático: El calentamiento global puede afectar la tasa de enfriamiento adiabático, influyendo en la circulación atmosférica y los patrones climáticos.