1. Ondas del cuerpo:
* W-Waves (ondas primarias): Estas son las ondas sísmicas más rápidas y viajan a través de sólidos y líquidos. Comprimen y expanden el material por el que pasan, similar a las ondas de sonido. Las ondas P hacen que el suelo se mueva de un lado a otro en la dirección en que viaja la ola.
* s-ondas (ondas secundarias): Estas ondas son más lentas que las ondas P y solo viajan a través de sólidos. Hacen que el suelo se mueva perpendicular a la dirección en la que viaja la ola, como un retorcimiento de serpiente.
2. Ondas de superficie:
* ondas de amor: Estas ondas viajan a lo largo de la superficie de la tierra y hacen que el suelo se mueva horizontalmente, como una deslizamiento de serpiente. Son las más destructivas de las olas sísmicas.
* Waves Rayleigh: Estas ondas viajan a lo largo de la superficie de la Tierra y hacen que el suelo se mueva en un movimiento elíptico y rodante. Son similares a las olas oceánicas.
Cómo viaja la energía:
1. Ruptura de falla: Un terremoto comienza con una ruptura a lo largo de una línea de falla dentro de la corteza terrestre. Esta ruptura libera una gran cantidad de energía.
2. Generación de ondas sísmicas: La energía liberada de la ruptura de la falla genera ondas sísmicas que viajan hacia afuera en todas las direcciones.
3. Propagación de onda: Las ondas del cuerpo (ondas P y ondas S) viajan a través del interior de la Tierra, mientras que las ondas de la superficie viajan a lo largo de la superficie de la Tierra.
4. Al alcanzar la superficie: Las ondas sísmicas finalmente alcanzan la superficie de la tierra, lo que hace que el suelo se agite y potencialmente cause daños.
Impacto en la superficie:
La intensidad de la sacudida del suelo en la superficie depende de varios factores, incluidos:
* Magnitud del terremoto: Los terremotos más grandes liberan más energía, lo que resulta en un temblor de tierra más fuerte.
* Distancia desde el epicentro: El temblor de tierra es más intenso más cerca del epicentro del terremoto.
* Condiciones geológicas: El tipo de roca y tierra en una región puede amplificar o amortiguar las ondas sísmicas.
En resumen:
La energía de un terremoto llega a la superficie de la tierra a través de la propagación de las ondas sísmicas. Estas ondas viajan a través del interior de la Tierra y a lo largo de su superficie, lo que hace que el suelo se agite y potencialmente cause daños.