He aquí por qué:
* sobrecarga de calor: Las lámparas de lava están diseñadas para bombillas de potencia específicas, típicamente 40W o menos. El uso de una bombilla de 60W puede generar demasiado calor, dañando potencialmente la lámpara, derretiendo la cera o incluso causando un peligro de incendio.
* Tamaño de la bombilla: Las bombillas de 60 W son mayores que las bombillas estándar utilizadas en las lámparas de lava, y pueden no encajar correctamente.
* Diseño de lámpara: Las lámparas de lava dependen de la salida de calor específica de sus bombillas diseñadas para crear el flujo de lava deseado. Una bombilla de mayor potencia puede interrumpir este equilibrio, lo que hace que la cera se sobrecaliente y se solidifique.
Siempre consulte las instrucciones del fabricante para la potencia recomendada para su lámpara de lava específica.
El uso de la bombilla correcta es crucial para el funcionamiento seguro y adecuado de su lámpara de lava.