La desaparición del campo magnético puede tener diversos efectos, dependiendo del uso que se le dé al electroimán. Por ejemplo, si se utiliza un electroimán para sostener un objeto metálico, el objeto caerá cuando se corte la electricidad. Si se utiliza un electroimán para generar electricidad, la electricidad dejará de generarse cuando se corte la electricidad.
La desaparición repentina del campo magnético también puede provocar daños en el propio electroimán. Esto se debe a que el campo magnético puede inducir corrientes en las partes metálicas del electroimán, lo que puede provocar que el metal se sobrecaliente y se derrita.
En general, es importante ser consciente de los efectos de cortar la electricidad a un electroimán. Esto es especialmente importante si el electroimán se utiliza para una aplicación crítica, como sostener un objeto pesado o generar electricidad.