Según la mecánica clásica, la velocidad final de un objeto que cae depende únicamente de la distancia que cae y de la aceleración de la gravedad. La fórmula para calcular la velocidad final (v) de un objeto que cae es:
$$v =√(2gh)$$
Aquí,
- \(g\) es la aceleración debida a la gravedad (aproximadamente 9,8 m/s²)
- \(h\) es la distancia caída por el objeto.
Se puede observar en la fórmula que la velocidad final de un objeto que cae depende únicamente de la distancia que cae y de la aceleración de la gravedad. Por tanto, la energía potencial, que es la energía almacenada en un objeto debido a su posición o altura, no influye directamente en la velocidad final de la caída de un objeto.