A continuación se muestran algunas formas en que la falta de sueño puede contribuir al aumento de peso:
* Aumento del hambre: Cuando no duermes bien, tu cuerpo produce más hormona grelina, que estimula el hambre, y niveles más bajos de la hormona leptina, que indica saciedad. Esta combinación puede conducir a una mayor ingesta de alimentos.
* Antojos de alimentos poco saludables: La falta de sueño también puede alterar los ritmos circadianos naturales del cuerpo, lo que puede provocar antojos de alimentos no saludables, como refrigerios azucarados o alimentos ricos en grasas.
* Actividad física reducida: Cuando tienes falta de sueño, es posible que tengas menos energía y motivación para hacer ejercicio. Esto puede provocar una disminución del gasto calórico y un aumento de peso.
* Aumento del estrés: La falta de sueño puede provocar un aumento del estrés, lo que puede elevar los niveles de cortisol, la hormona del estrés. Los niveles altos de cortisol pueden provocar aumento de peso, especialmente alrededor de la cintura.
Es importante señalar que la falta de sueño no es la única causa del aumento de peso. Si tiene dificultades para mantener un peso saludable, hable con su médico sobre sus hábitos de sueño y otros factores potenciales.