La principal causa del calentamiento global inducida por el hombre es la quema de combustibles fósiles para la producción de energía, el transporte y las actividades industriales. La quema de estos combustibles libera grandes cantidades de CO2 y otros gases de efecto invernadero a la atmósfera, lo que contribuye a aumentar el efecto invernadero. La deforestación, particularmente en las regiones tropicales, también contribuye al calentamiento global al reducir la capacidad de la Tierra para absorber CO2.
El calentamiento global tiene varios impactos adversos en el clima y los ecosistemas de la Tierra, entre ellos:
1. Aumento del nivel del mar: A medida que aumenta la temperatura de la Tierra, los océanos se expanden y el derretimiento de los glaciares y las capas de hielo contribuye aún más al aumento del nivel del mar. Esto plantea una amenaza importante para las comunidades y los ecosistemas costeros, provocando inundaciones, erosión y salinización de los recursos de agua dulce.
2. Eventos climáticos extremos: El calentamiento global intensifica la frecuencia y gravedad de los fenómenos meteorológicos extremos, como huracanes, olas de calor, sequías, incendios forestales y fuertes lluvias. Estos fenómenos meteorológicos extremos pueden causar daños importantes a la infraestructura, pérdida de vidas y alteración de los ecosistemas.
3. Patrones climáticos cambiantes: El calentamiento global altera los patrones climáticos, lo que resulta en cambios en los patrones de precipitación, cambios en el calendario de las estaciones y la alteración de los ecosistemas que están adaptados a condiciones climáticas específicas.
4. Impacto sobre la biodiversidad: El calentamiento global plantea una amenaza a la biodiversidad al alterar los hábitats, alterar la distribución de las especies y llevar a muchas especies al borde de la extinción.
Para abordar el calentamiento global y mitigar sus impactos, se necesitan esfuerzos globales concertados para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, hacer la transición a fuentes de energía sostenibles, proteger los bosques y mejorar la resiliencia de los ecosistemas y las comunidades.