1. Beneficios económicos a largo plazo
Invertir en fuentes de electricidad libres de carbono, como la energía solar y eólica, puede ayudar a las empresas eléctricas a fijar precios de electricidad estables a largo plazo. Esto se debe a que el costo de estas tecnologías está disminuyendo rápidamente y no están sujetas a las mismas fluctuaciones de precios que los combustibles fósiles. Además, la electricidad libre de carbono puede ayudar a las empresas eléctricas a evitar los costos asociados con el cambio climático, como los fenómenos meteorológicos extremos y el aumento del nivel del mar.
2. Demanda del cliente
Existe una creciente demanda de energía limpia por parte de los clientes. Un estudio reciente del Pew Research Center encontró que el 70% de los estadounidenses cree que el gobierno debería hacer más para abordar el cambio climático, y el 57% de los estadounidenses dice que estaría dispuesto a pagar más por la electricidad si proviniera de fuentes renovables.
3. Beneficios medioambientales
Invertir en fuentes de electricidad libres de carbono puede ayudar a las empresas eléctricas a reducir su impacto ambiental. Las emisiones de carbono procedentes de la generación de energía contribuyen de manera importante al cambio climático, y la inversión en energía renovable puede ayudar a las empresas eléctricas a reducir su huella de carbono.
4. Regulaciones futuras
Es probable que las regulaciones futuras sean más estrictas en lo que respecta a las emisiones de carbono procedentes de la generación de energía. Al invertir ahora en fuentes de electricidad libres de carbono, las empresas eléctricas pueden evitar el riesgo de tener que realizar costosas modificaciones en sus centrales eléctricas en el futuro.
En conclusión, hay una serie de razones por las que las empresas eléctricas deberían invertir en fuentes de electricidad libres de carbono, incluidos beneficios económicos a largo plazo, demanda de los clientes, beneficios ambientales y regulaciones futuras.