Hallazgos clave del estudio:
1. Reducción de gases de efecto invernadero :El estudio encontró que los sistemas de transporte público en los Estados Unidos evitaron más de 189 millones de toneladas métricas de emisiones de CO2 en 2021. Esta reducción equivale a retirar aproximadamente 40 millones de vehículos de pasajeros de las carreteras durante todo un año.
2. Criterios Contaminantes del Aire :El transporte público también jugó un papel crucial en la reducción de los contaminantes atmosféricos de criterio, incluidas las partículas (PM), los óxidos de nitrógeno (NOx) y los compuestos orgánicos volátiles (COV). En 2021, el transporte público evitó la liberación de casi 1,5 millones de toneladas de contaminantes atmosféricos criterio, lo que contribuyó a mejorar la calidad del aire.
3. Variaciones regionales :El estudio reveló variaciones regionales en el impacto del transporte público sobre las emisiones. Por ejemplo, las ciudades con poblaciones más densas y redes de transporte más extensas, como Nueva York y San Francisco, lograron mayores reducciones de emisiones en comparación con áreas menos densamente pobladas.
4. Beneficios Económicos :La reducción de emisiones de GEI y contaminantes lograda por los sistemas de transporte público también se traduce en beneficios económicos. Al mitigar los efectos negativos de la contaminación del aire, como los costos de atención médica, la pérdida de productividad y el daño a los ecosistemas, el transporte público contribuye al ahorro social general.
5. Mitigación del cambio climático :Los hallazgos enfatizan el papel vital del transporte público en la mitigación del cambio climático. Al reducir las emisiones relacionadas con el transporte, el transporte público respalda los esfuerzos para cumplir los objetivos climáticos nacionales y globales y garantiza un futuro más sostenible.
El estudio de APTA subraya la importancia de invertir y ampliar los sistemas de transporte público como una estrategia clave para abordar las preocupaciones ambientales y combatir el cambio climático. Fomentar el uso del transporte público ofrece múltiples beneficios, entre ellos la reducción de GEI y emisiones contaminantes, la mejora de la calidad del aire, el ahorro económico y la promoción del desarrollo urbano sostenible.