Los haptofitos son algas diminutas unicelulares que flotan en los océanos del mundo. Están cubiertos de pequeñas escamas hechas de carbonato de calcio, que ayudan a reflejar la luz del sol. Sin embargo, los haptofitos tienen una forma única de capturar la luz solar que les permite superar este desafío.
El equipo de investigación, dirigido por el Dr. Satoshi Inaba, descubrió que los haptofitos tienen un complejo proteico especial llamado complejo LH2. Este complejo se encuentra en los cloroplastos de las algas, donde tiene lugar la fotosíntesis. El complejo LH2 es capaz de absorber la luz solar en una amplia gama de longitudes de onda, incluidas las longitudes de onda que se reflejan en las escamas de carbonato de calcio de las algas.
Además del complejo LH2, el equipo de investigación también descubrió que los haptofitos tienen una antena especial que capta la luz llamada complejo proteína clorofila fucoxantina (FCP). El FCP es capaz de capturar la luz solar en longitudes de onda incluso más bajas que el complejo LH2. Esto permite que las haptofitas capturen y utilicen una gama más amplia de luz solar que otras algas.
Los hallazgos del equipo de investigación proporcionan nuevos conocimientos sobre cómo los haptofitos pueden aprovechar de manera eficiente la luz solar para la fotosíntesis. Este conocimiento podría utilizarse para desarrollar nuevas tecnologías de captura de carbono y biocombustibles. Por ejemplo, los científicos podrían diseñar otras algas para producir más complejos LH2 y FCP, lo que les permitiría capturar y utilizar más luz solar. Esto podría conducir al desarrollo de biocombustibles y sistemas de captura de carbono más eficientes.
Los hallazgos del equipo de investigación fueron publicados en la revista Nature Plants.