Un nuevo estudio realizado por investigadores de la Universidad de California, Berkeley, descubrió que las compras por pánico son una respuesta común a las pandemias, pero no es una forma eficaz de protegerse a uno mismo ni a la familia. De hecho, las compras de pánico pueden empeorar la situación al crear escasez de bienes esenciales y aumentar los precios.
El estudio, que fue publicado en la revista "Disaster Prevention and Management", examinó el impacto de las compras de pánico en tres pandemias:la pandemia de gripe de 1918, la pandemia de H1N1 de 2009 y la actual pandemia de COVID-19. Los investigadores descubrieron que las compras de pánico fueron un problema importante en las tres pandemias y que provocaron escasez de bienes esenciales como alimentos, agua y medicinas. Además, las compras de pánico provocaron un aumento de los precios, lo que hizo más difícil que las personas pudieran adquirir los bienes y servicios que necesitaban.
Los investigadores también descubrieron que era más probable que se produjeran compras de pánico en áreas con altos niveles de uso de las redes sociales. Esto se debe a que las redes sociales pueden difundir rumores e información errónea sobre la pandemia, lo que puede generar mayor ansiedad y pánico.
El estudio concluye que las compras por pánico son un comportamiento contraproducente que, de hecho, puede empeorar la situación. Los investigadores recomiendan que las personas eviten las compras de pánico y, en cambio, se concentren en prepararse para una pandemia de manera racional y mesurada.
A continuación se ofrecen algunos consejos para prepararse para una pandemia sin entrar en pánico:
- Cree un plan sobre cómo mantenerse seguro y saludable si ocurre una pandemia.
- Abastecerse de bienes esenciales, pero evite comprar más de lo que necesita.
- Manténgase informado sobre la pandemia, pero evite difundir rumores y desinformación.
- Sea tranquilo y racional, y evite el pánico.