Una de las principales preocupaciones de los motores GDI es que pueden producir niveles más altos de emisiones de partículas (PM) que los motores PFI. PM es un tipo de contaminación del aire que puede causar una serie de problemas de salud, incluidas enfermedades respiratorias y cardiovasculares. Los motores GDI producen niveles más altos de PM porque el combustible se inyecta directamente en la cámara de combustión, lo que puede provocar una combustión incompleta y la formación de partículas de hollín.
Otra preocupación con los motores GDI es que su mantenimiento puede ser más caro que el de los motores PFI. Esto se debe a que los motores GDI requieren un mayor nivel de precisión en su diseño y construcción. Además, los motores GDI suelen utilizar componentes más caros, como inyectores y bombas de combustible de alta presión.
En general, existe cierto debate sobre si los motores GDI son realmente la opción ecológica. Si bien ofrecen una serie de beneficios potenciales sobre los motores PFI, también tienen algunos inconvenientes, como mayores emisiones de PM y mayores costos de mantenimiento. En última instancia, la decisión de comprar un motor GDI es personal y debe tomarse después de una cuidadosa consideración de todos los factores involucrados.