Las sondas Van Allen, que se lanzaron en 2012 para investigar los cinturones de radiación de la Tierra, descubrieron fenómenos misteriosos que perturban a los satélites y a los astronautas en las regiones polares. Estas regiones albergan intensas zonas de partículas cargadas atrapadas por el campo magnético de la Tierra, conocidas como óvalos aurorales.
La misión Arctic Charged Auroras Phenomena (ACAP) tiene como objetivo desentrañar estos fenómenos enviando cargas útiles instrumentadas al borde del espacio para registrar campos eléctricos y ondas de plasma dentro de la zona auroral. Los cohetes utilizarán un instrumento recientemente desarrollado llamado Sonda Langmuir de Agujas Múltiples, que puede medir campos eléctricos y plasma.
Los investigadores esperan que los datos obtenidos por ACAP ayuden a arrojar luz sobre los enigmáticos procesos que ocurren cerca de los polos de la Tierra. ACAP es parte del Programa de Cohetes Sondadores de la NASA, que permite a los científicos realizar investigaciones breves de la atmósfera superior y más allá utilizando pequeños cohetes.