Aunque ciertamente no es una forma práctica de encender su hogar, puede generar electricidad a partir de frutas. El ácido en la fruta interactúa con los electrodos para crear una pequeña cantidad de voltaje. Crear una batería de frutas es un experimento interesante para probar con niños en edad escolar. Una vez que tenga los materiales necesarios, puede experimentar con diferentes frutas para ver los resultados variados.
Cómo funcionan las baterías de frutas
Las sustancias químicas en las frutas, particularmente las cítricas ácidas, se pueden convertir en energía. La estructura de una batería alimentada por frutas imita la de una batería real. Dos metales diferentes, generalmente un zinc y un cobre, se insertan en la fruta y actúan como polos positivo y negativo. Un cable actúa como un conductor entre los polos y se puede usar para conducir una pequeña cantidad de voltaje (generalmente 1/2 a 3/4 de voltios de una sola pieza de fruta). Dependiendo del tipo y la cantidad de frutas que se utilicen, es posible que pueda encender una pequeña bombilla LED o incluso hacer funcionar un motor pequeño.
Materiales de la batería de frutas
Al reunir los materiales para su fruta experimento de batería, tenga en cuenta que esta es una prueba. Involucre a los niños en la toma de decisiones. Parte de la diversión de la ciencia es probar diferentes métodos; algunos funcionarán, otros no, todo es parte del proceso de aprendizaje.
Necesitarás dos tipos de metales para los polos positivo y negativo. Puede comprar electrodos de zinc y cobre, pero también es interesante probar otros materiales domésticos como un tornillo galvanizado y un trozo de cable de cobre.
También necesitará un cable para actuar como conductor y un cocodrilo. los clips son útiles para conectar el cable a los polos positivo y negativo. Para medir sus resultados, tenga una pequeña luz LED para conectar el conductor o utilice un medidor para medir el voltaje.
Realización del experimento
Con una variedad de frutas a la mano, intente insertar los polos positivo y negativo y conectar el conductor. Vea qué frutas conducen más electricidad (aquí es donde un medidor sería útil). Algunos elementos para probar incluyen limones, naranjas, limas, manzanas, papas, tomates y vasos de jugo de frutas.
Haga que los niños formulen hipótesis antes de instalar las baterías. Luego podrán adivinar qué frutas (o vegetales) producirán la mayor cantidad de electricidad y ver si sus pensamientos originales fueron correctos.