Estas son algunas de las ventajas pasadas de CFC:
* Excelentes refrigerantes: Los CFC eran refrigerantes muy efectivos, no eran tóxicos, no inflamables y tenían una alta capacidad de calor.
* solventes versátiles: Se usaron como solventes en la limpieza, desengrasamiento y otros procesos industriales.
* Propulsores en aerosoles: Los CFC se usaron ampliamente como propulsores en aerosoles debido a sus propiedades no inflamables y no corrosivas.
* Agentes de soplado de espuma: Los CFC se utilizaron en la producción de espumas, como las que se encuentran en el aislamiento y el envasado.
Sin embargo, estas ventajas ahora están eclipsadas por las graves consecuencias de los CFC:
* agotamiento de la capa de ozono: Los CFC son el principal culpable en el agotamiento de la capa de ozono, lo que permite que la radiación UV nociva alcance la superficie de la Tierra.
* Cambio climático: Los CFC también son potentes gases de efecto invernadero, que contribuyen al calentamiento global.
Debido a estos impactos negativos, los CFC se han eliminado en gran medida en la mayor parte del mundo . Se han desarrollado alternativas, como Hydrofluorocarbons (HFC), y ahora se usan en muchas aplicaciones. Si bien los HFC tienen sus propias preocupaciones ambientales, generalmente se consideran menos dañinos que los CFC.
Es crucial comprender que, si bien los CFC tenían algunas ventajas en el pasado, su uso ya no es aceptable debido a sus graves consecuencias ambientales. El enfoque debe estar en utilizar alternativas sostenibles y reducir nuestro impacto en el planeta.