En general, la concentración recomendada de QAC para la desinfección oscila entre 50 y 200 partes por millón (ppm) de ingrediente activo. Esta gama proporciona un equilibrio entre eficacia contra microorganismos y toxicidad potencial. Para aplicaciones específicas, se debe consultar la etiqueta del producto o la ficha técnica para determinar la concentración adecuada y las instrucciones de uso.
Algunos QAC comunes utilizados para la desinfección incluyen:
- Cloruro de benzalconio
- Cloruro de alquildimetilbencilamonio (ADBAC)
- Cloruro de didecil dimetil amonio (DDAC)
- Cloruro de octildecildimetilamonio (ODDAC)
Es importante tener en cuenta que los QAC no son eficaces contra algunos microorganismos, como las esporas bacterianas y ciertos virus. Si se requiere una desinfección completa, es posible que se necesiten desinfectantes alternativos. Además, se deben tomar las precauciones de seguridad adecuadas al manipular y utilizar QAC, incluido el uso de equipo de protección personal (PPE) y seguir prácticas seguras de manipulación y eliminación según lo especificado en las instrucciones del fabricante.