Sí, la sal es siempre un compuesto iónico. Un compuesto iónico es un compuesto químico formado por iones, que son átomos o moléculas que han perdido o ganado electrones, lo que da como resultado una carga eléctrica neta. Las sales suelen estar compuestas de cationes cargados positivamente y aniones cargados negativamente, que se mantienen unidos por atracción electrostática. El tipo más común de sal es el cloruro de sodio (NaCl), que está compuesto por iones de sodio con carga positiva (Na+) y iones de cloruro con carga negativa (Cl-). Otros ejemplos de sales incluyen cloruro de potasio (KCl), cloruro de calcio (CaCl2) y sulfato de magnesio (MgSO4).