Un átomo consta de un núcleo rodeado de electrones. El núcleo contiene protones y neutrones. Los protones tienen carga positiva, los electrones tienen carga negativa y los neutrones no tienen carga. El número total de protones en un átomo determina su número atómico y su lugar en la tabla periódica. La cantidad de electrones en un átomo suele ser igual a la cantidad de protones, por lo que la mayoría de los átomos son neutros. Sin embargo, si un átomo gana o pierde electrones, queda cargado y se llama ion. Un átomo con carga positiva se llama catión y un átomo con carga negativa se llama anión.