Hay dos tipos principales de sabores artificiales:
* Sabores idénticos a los de la naturaleza son químicamente idénticos a los sabores naturales que imitan. Estos sabores se crean aislando y purificando los compuestos responsables del sabor deseado de fuentes naturales.
* Sabores no idénticos a los naturales no son químicamente idénticos a los sabores naturales que imitan. Estos sabores se crean combinando diferentes químicos para crear un sabor similar al sabor natural.
Los sabores artificiales se utilizan a menudo en lugar de los naturales porque son más baratos, más consistentes y tienen una vida útil más larga. También se pueden utilizar para crear sabores que no existen en la naturaleza, como el sabor de la cola de cereza o el chicle.
Los sabores artificiales son seguros para consumir. Están regulados por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), que garantiza que se utilicen en cantidades seguras.
Aquí hay una explicación más detallada de cómo funcionan los sabores artificiales:
* Receptores gustativos Se encuentran en la lengua, el paladar y la parte posterior de la garganta. Estos receptores se unen a moléculas de compuestos de sabor y envían señales al cerebro, que las interpreta como gustos.
* Sabores artificiales están diseñados para unirse a los mismos receptores gustativos que los sabores naturales. Por eso pueden imitar el sabor de los sabores naturales.
* La cantidad de sabor artificial utilizado en un alimento o bebida se controla cuidadosamente para garantizar que el sabor no sea demasiado fuerte ni demasiado débil.
* Sabores artificiales se puede utilizar para crear una amplia variedad de sabores, incluidos dulce, ácido, salado, amargo y umami (sabroso).
Los sabores artificiales son una parte importante de la industria alimentaria. Nos permiten disfrutar de una amplia variedad de sabores en nuestros alimentos y bebidas.