Puedes probar este sencillo experimento para convertir el agua salada en agua dulce. Este es un proceso llamado "desalinización". El agua se evapora y deja la sal atrás, por lo que el agua que recolectas en el vaso de tu colección es agua potable. Asegúrese de que sea un día soleado antes de comenzar este experimento.
Llene el recipiente hasta la mitad con agua. Agregue unas cucharadas de sal al agua. Haz el agua tan salada como quieras. Revuelva la sal en el agua para asegurarse de que esté mezclada.
Coloque el vaso dentro del recipiente. Si el agua salada fluye dentro de la taza, elimine parte del agua.
Envuelva la envoltura plástica sobre la parte superior del tazón. Asegúrese de que esté bien envuelto alrededor del tazón.
Coloque un pequeño peso en el centro de la envoltura plástica, sobre la taza. Use una piedra pequeña o cualquier objeto pequeño y pesado. Esto pesará la envoltura plástica lo suficiente como para permitir que el agua gotee en el vaso.
Coloque el recipiente en algún lugar soleado. Déjalo allí por unas horas. Después de unas horas, debe tener agua limpia en el vaso y una capa de sal en el interior del tazón.
Consejo
Si el agua no termina en el taza, intente envolviendo la envoltura plástica un poco más libremente, o usando un poco más pesado.
Advertencia
No beba el agua salada.