Sin embargo, los antiguos no imaginaban a las estrellas unidas a las esferas literal y transparentes. En cambio, utilizaron el concepto de esferas celestiales como un modelo para explicar los movimientos observados de las estrellas.
Así es como funcionó:
* múltiples esferas: El modelo geocéntrico imaginó una serie de esferas concéntricas, cada una girando a su propia velocidad. La tierra estaba en el centro, y la luna, el sol, los planetas y las estrellas estaban unidas a diferentes esferas.
* movimiento circular: Se suponía que las esferas eran perfectamente suaves y transparentes, permitiendo que la luz pase. La rotación de estas esferas explicó las rutas circulares observadas de los objetos celestiales.
* Sin esferas físicas: Es importante tener en cuenta que los antiguos griegos (que desarrollaron el modelo geocéntrico) no creían que estas esferas fueran objetos físicos reales. Eran modelos conceptuales para explicar los fenómenos celestiales.
Si bien el concepto de esferas celestiales puede parecer extraña hoy en día, fue un logro notable en su tiempo. Proporcionó un marco consistente para comprender los movimientos del cosmos y se usó durante siglos.
El modelo geocéntrico fue finalmente reemplazado por el modelo heliocéntrico , propuesto por Nicolaus copernicus en el siglo XVI. Este modelo colocó el sol en el centro del sistema solar, con la Tierra y los otros planetas que lo orbitaban.