1. Más cercano al sol: Mercurio es el planeta más cercano al sol, lo que lleva a temperaturas extremas y un período orbital muy corto (88 días de la Tierra).
2. Planeta terrestre más pequeño: Es el planeta más pequeño de nuestro sistema solar, incluso más pequeño que algunas de las lunas de otros planetas.
3. Atmósfera extremadamente delgada: Mercurio tiene una atmósfera muy delgada, casi insignificante, llamada exosfera. Esto se debe a que su baja gravedad y proximidad al sol dificultan la retención de cualquier gas.
4. Núcleo de hierro gigante: En comparación con su tamaño, el mercurio tiene un núcleo de hierro inusualmente grande, lo que representa aproximadamente el 85% de su radio. Se cree que esto es el resultado de un impacto masivo al principio de su historia.
5. Variaciones de temperatura extrema: El mercurio experimenta las variaciones de temperatura más extremas de cualquier planeta, que varía de -173 ° C (-279 ° F) por la noche a 427 ° C (801 ° F) durante el día.
6. No hay lunas: A diferencia de la mayoría de los planetas en nuestro sistema solar, Mercurio no tiene lunas naturales.
7. Cuenca de caloris: Cuenta con el cráter de impacto más grande en nuestro sistema solar, la cuenca de Calóris, que abarca casi 1,550 kilómetros (960 millas) de diámetro.
8. Intrigante campo magnético: Si bien es débil, el mercurio tiene un campo magnético, lo cual es inusual teniendo en cuenta su pequeño tamaño y su rotación lenta.
9. Características de la superficie extrañas: La superficie de Mercurio está cubierta de cráteres, acantilados y llanuras, lo que sugiere un pasado tumultuoso de impactos y actividad volcánica.
10. Difícil de observar: La proximidad de Mercurio al sol hace que sea difícil observar desde la Tierra, ya que a menudo se pierde en el resplandor del sol.
Estas características únicas hacen de Mercurio un planeta fascinante y enigmático, desafiando constantemente nuestra comprensión de la formación y evolución planetaria.