Sin embargo, podemos usar nuestro conocimiento de la física y la información que recopilamos de los telescopios y sondas para imaginar cómo podrían sentir:
* Gravedad: Los planetas enanos tienen mucha menos gravedad que la Tierra. Te sentirías más ligero y podrías saltar mucho más alto. La atracción de la gravedad se sentiría similar a lo que podrías experimentar en la luna.
* superficie: Las superficies de los planetas enanos pueden ser increíblemente variadas. Algunos, como Plutón, están helados y están cubiertos de heladas de nitrógeno. Otros, como Ceres, tienen superficies rocosas con cráteres y posiblemente incluso signos de actividad del agua pasada.
* atmósfera: Algunos planetas enanos tienen atmósferas delgadas, mientras que otros no tienen ninguna. Si estuvieras en un planeta enano con una atmósfera, puede parecer ligeramente diferente al aire de la Tierra.
* Temperatura: Los planetas enanos son muy, muy fríos, con temperaturas muy por debajo de la congelación. El frío sería intenso y peligroso, y necesitaría un equipo especial para sobrevivir.
En resumen:
Es imposible sentir realmente cómo es en un planeta enano sin ir realmente allí. Pero según nuestro conocimiento, sería una experiencia única y desafiante con baja gravedad, una superficie potencialmente variada y un frío extremo.