1. Emisión: El sol, al ser una bola caliente de gases incandescentes, emite continuamente energía en forma de radiación electromagnética, incluida la luz visible, los rayos ultravioleta (UV) y la radiación infrarroja.
2. Propagación: Una vez emitidas, las ondas de luz del sol comienzan a propagarse hacia el espacio. Estas ondas consisten en campos eléctricos y magnéticos oscilantes perpendiculares entre sí.
3. No se requiere ningún medio: Las ondas de luz no requieren ningún medio físico, como aire o agua, para viajar. Pueden propagarse a través del vacío del espacio sin pérdida de energía.
4. Velocidad de la Luz: La luz viaja a una velocidad constante de aproximadamente 299.792.458 metros por segundo (186.282 millas por segundo), que es el límite de velocidad universal. Esto significa que la luz solar tarda una cantidad de tiempo específica en viajar desde el Sol hasta la Tierra.
5. Distancia: La distancia promedio entre el Sol y la Tierra es de unos 150 millones de kilómetros (93 millones de millas). Esta distancia se conoce como una Unidad Astronómica (UA).
6. Tiempo de viaje: Dada la velocidad de la luz y la distancia entre el sol y la Tierra, la luz del sol tarda aproximadamente 8 minutos y 20 segundos en viajar del sol a la Tierra. Esto significa que cuando miramos al sol, lo vemos tal como apareció hace 8 minutos y 20 segundos.
7. Absorción y Dispersión: A medida que la luz solar viaja por el espacio, una pequeña porción es absorbida o dispersada por partículas de polvo, moléculas de gas y otros objetos celestes presentes entre el Sol y la Tierra. Por eso vemos el cielo azul durante el día.
8. Llegar a la Tierra: La luz solar restante que evita la absorción y dispersión continúa su viaje y llega a la atmósfera terrestre. La atmósfera interactúa además con la luz solar, dando lugar a fenómenos como la refracción, la reflexión y la dispersión, que contribuyen a diversos efectos atmosféricos, colores y condiciones climáticas.
En resumen, la luz del sol viaja a través del vacío del espacio y llega a la Tierra en aproximadamente 8 minutos y 20 segundos. El viaje de la luz no se ve afectado por la ausencia de un medio y demuestra las propiedades fundamentales de la radiación electromagnética y la inmensidad de nuestro sistema solar.