El gas de los cúmulos de galaxias no fluye como la miel. La miel es un fluido viscoso que fluye lentamente, mientras que el gas en los cúmulos de galaxias se compone principalmente de hidrógeno y helio, es un gas muy fino que puede fluir fácilmente. La diferencia de viscosidad se debe a las diferentes densidades de los dos fluidos. La miel es un fluido denso con una viscosidad de aproximadamente 1.000 veces la del agua, mientras que el gas en los cúmulos de galaxias tiene una densidad de aproximadamente 1/1000 de la del aire, lo que lo hace muy delgado y fácil de fluir.