No hay consenso entre los estudiosos sobre si la civilización occidental está en declive o no. Algunos argumentan que Occidente está experimentando actualmente un período de decadencia, citando varios factores como la decadencia de los valores tradicionales, el aumento de la inestabilidad política, el aumento del autoritarismo, la creciente amenaza del cambio climático y la creciente desigualdad económica. Otros sostienen que Occidente no está en declive, sino que más bien está atravesando un período de transformación y adaptación a las cambiantes circunstancias globales.
La idea de que la civilización occidental está en declive no es nueva. Ha sido expresado por varios filósofos, historiadores y comentaristas sociales a lo largo de la historia. Algunos de los primeros ejemplos de este sentimiento se pueden encontrar en las obras de los antiguos filósofos griegos y romanos, como Platón y Tácito, quienes lamentaron la decadencia moral y el declive de sus propias sociedades.
En los tiempos modernos, la idea del declive de la civilización occidental ha sido popularizada por varios intelectuales, como Oswald Spengler, Arnold J. Toynbee y Paul Kennedy, quienes han sostenido que las civilizaciones, incluida Occidente, surgen y caen con el tiempo y que Occidente está actualmente en declive debido a una variedad de factores, como el declive demográfico, el estancamiento económico y la inestabilidad política.
Es importante señalar que la idea del declive de la civilización occidental es a menudo controvertida y ha sido criticada por algunos estudiosos que sostienen que se basa en una interpretación sesgada o selectiva de los acontecimientos y tendencias históricos. Además, la tesis ha sido acusada de utilizarse para legitimar ideologías xenófobas o racistas al sugerir que Occidente es superior a otras civilizaciones y que su decadencia es resultado de la influencia de culturas no occidentales.