En un nuevo estudio, ingenieros de la Universidad de Pensilvania utilizaron microscopía de fuerza atómica para medir la fricción entre una superficie de diamante y una punta a nanoescala. Descubrieron que la fricción era significativamente menor de lo esperado y que el resbaladizo era causado por la presencia de átomos de hidrógeno y oxígeno en la superficie.
Los investigadores creen que sus hallazgos podrían tener implicaciones para el diseño de nuevos materiales y dispositivos que requieran baja fricción. Por ejemplo, el diamante podría usarse como recubrimiento para sistemas microelectromecánicos (MEMS) u otros dispositivos que requieran un movimiento preciso.
"Nuestros hallazgos proporcionan una nueva comprensión de los mecanismos a escala atómica que contribuyen a la resbaladiza del diamante", dijo el autor principal del estudio, Mauricio Terrones. "Este conocimiento podría utilizarse para diseñar nuevos materiales y dispositivos que requieran baja fricción".
El estudio se publica en la revista Nature Nanotechnology.