Doble hélice de ADN. Crédito:dominio público
Investigadores de la Universidad de Texas en Austin han desarrollado una máquina a nanoescala hecha de ADN que puede caminar aleatoriamente en cualquier dirección a través de superficies con baches. Las aplicaciones futuras de un caminante de ADN de este tipo podrían incluir un detector de cáncer que podría vagar por el cuerpo humano en busca de células cancerosas y etiquetarlas para imágenes médicas o selección de fármacos.
El estudio de los investigadores Cheulhee Jung, Peter B. Allen y Andrew Ellington, publicado esta semana en la revista Nanotecnología de la naturaleza , desarrolló máquinas de ADN que podían caminar, no programado y en diferentes direcciones, sobre una superficie recubierta de ADN. Previamente, Los caminantes de nanopartículas solo podían caminar sobre caminos unidimensionales y bidimensionales precisos y programados. Este andador pudo mover 36 pasos, y su movimiento de forma aleatoria es diferente del movimiento visto en otros estudios.
"Este es un importante paso adelante en el desarrollo de máquinas de ácido nucleico a nanoescala que pueden actuar de forma autónoma en una variedad de condiciones, incluso en el cuerpo, "dijo Ellington, profesor del Departamento de Biociencias Moleculares y miembro del Centro de Sistemas y Biología Sintética de la UT. "La nanotecnología del ADN es especialmente interesante porque explora el mundo de las 'computadoras de materia, 'donde los cálculos (incluido el caminar) se llevan a cabo mediante objetos físicos, en lugar de lanzaderas electrónicas o magnéticas. Los caminadores de ADN pueden eventualmente permitir que las células protectoras caminen por la superficie de los órganos, calculando constantemente si un cáncer está presente ".
Las aplicaciones prácticas más inmediatas pueden incluir desplegar el andador de ADN en el cuerpo para que pueda amplificar las señales de las células cancerosas para que los médicos las identifiquen y apunten más fácilmente. También puede haber implicaciones para la entrega futura de terapias a nanoescala.
Aunque puede ser un largo camino desde el diagnóstico del cáncer hasta su curación, "Todos los avances comienzan con pequeños pasos. Solo en este caso, son los pasos de un caminante de ADN, "dijo el coautor Jung.
El andador está hecho de una sola pieza de ADN con dos piernas conectadas por un torso. Como un humano se mueve adelantando una pierna, luego levantando la otra pierna y adelantándola. El caminante decide de forma autónoma y aleatoria dónde colocar la pierna en cada paso. El estudio demostró que mientras la máquina a nanoescala caminaba, no recorrió la misma zona dos veces.