* Evidencia directa:
* Imágenes y videos: Los astronautas Apollo 11 tomaron miles de fotografías y horas de video de video, que muestra la superficie lunar, el módulo lunar, los astronautas mismos e incluso sus huellas.
* muestras lunares: Los astronautas de Apolo 11 trajeron más de 200 libras de rocas lunares y suelo, que han sido analizados por científicos de todo el mundo y que son claramente diferentes de las rocas que se encuentran en la Tierra.
* Reflector láser: El Apolo 11 Astronauts dejó un retrorlector en la luna, que permite a los científicos rebotar rayos láser de la luna para medir su distancia desde la tierra con extrema precisión.
* Verificación independiente: Múltiples países, incluida la URSS, rastrearon la misión Apollo 11 utilizando su propio radar y telescopios, confirmando la trayectoria y el aterrizaje de la nave espacial.
* Evidencia indirecta:
* Observaciones científicas: Numerosos instrumentos científicos dejados en la luna por las misiones posteriores del Apolo continúan proporcionando datos sobre el entorno lunar, corroborando aún más los aterrizajes del Apolo.
* El testimonio de miles de personas: Cientos de ingenieros, científicos y otro personal que trabajaron en el programa Apollo han atestiguado públicamente el éxito de la misión.
Las teorías de conspiración con respecto al aterrizaje de la luna no están respaldadas por la evidencia. Se basan en malentendidos de principios científicos, malas interpretaciones de evidencia y, a menudo, implican distorsiones deliberadas de hechos.
Es importante confiar en fuentes de información de buena reputación y ser crítico con reclamos que carecen de evidencia de apoyo. La comunidad científica, incluidos los investigadores independientes, ha investigado a fondo los aterrizajes del Apolo y concluyó que eran reales.