* Air: El aire tiene una baja densidad y una baja capacidad térmica específica. Esto significa que se necesita menos energía para elevar la temperatura del aire en comparación con otras sustancias.
* suelo: El suelo tiene una capacidad de calor específica más alta que el aire, lo que significa que se necesita más energía para calentarse.
* agua: El agua tiene la mayor capacidad de calor específica de los tres. Se necesita una cantidad significativa de energía para elevar la temperatura del agua, por lo que es la más lenta para calentarse.
En términos simples: El aire es como una manta liviana, fácil de calentar. El suelo es como una manta más pesada, que requiere más esfuerzo para calentarse. El agua es como un edredón grueso y esponjoso, que toma la mayor energía para calentarse.