1. Durante el otoño:
* Aceleración gravitacional (g): Esta es la aceleración constante debido a la gravedad, actuando hacia abajo, aproximadamente 9.8 m/s². Esto significa que la velocidad descendente de la pelota aumenta en 9.8 metros por segundo cada segundo que cae.
2. Durante el rebote:
* Aceleración de impacto: Cuando la pelota golpea el suelo, experimenta una desaceleración muy rápida (aceleración negativa) a medida que se detiene. Esto es seguido por una aceleración igualmente rápida a medida que se recupera hacia arriba. Esta aceleración es mucho más grande que la aceleración gravitacional y ocurre en muy poco tiempo.
* Elasticidad: Las propiedades del material de la pelota y la superficie determinan cuánta energía se pierde durante el rebote. Un rebote perfectamente elástico conservaría toda la energía, lo que conduciría a la misma velocidad de rebote que la velocidad de impacto. Los rebotes del mundo real implican cierta pérdida de energía, lo que lleva a una velocidad de rebote ligeramente menor.
3. Durante el aumento:
* Desaceleración gravitacional: A medida que la pelota viaja hacia arriba, la gravedad actúa contra su movimiento, lo que hace que disminuya la velocidad. Esta es esencialmente aceleración negativa (desaceleración) debido a la gravedad.
En resumen:
Una pelota de rebotes se acelera constantemente. Se acelera hacia abajo debido a la gravedad, se desacelera rápidamente durante el impacto, se acelera hacia arriba durante el rebote y se desacelera hacia arriba nuevamente debido a la gravedad. El punto clave es que la aceleración es cualquier cambio en la velocidad, y el rebote implica cambios tanto en la velocidad como en la dirección.