* Teóricamente, la gravedad nunca alcanza realmente cero. Según la ley de gravitación universal de Newton, cada partícula en el universo ejerce una fuerza gravitacional sobre cualquier otra partícula. Esta fuerza disminuye con la distancia, pero nunca desaparece por completo.
* Prácticamente, la gravedad se vuelve insignificante a distancias extremadamente grandes. Si bien técnicamente no es cero, la fuerza gravitacional entre dos objetos se vuelve increíblemente débil a las grandes distancias. Para fines prácticos, se considera efectivamente cero.
Piénselo de esta manera:
* Imagina lanzar una pelota: Puedes sentir la gravedad de la Tierra tirando de la pelota hacia abajo.
* Ahora imagine lanzar la pelota al espacio: La pelota aún se vería afectada por la gravedad de la Tierra, pero la fuerza sería mucho más débil. A medida que la pelota viaja aún más, el efecto de la gravedad de la Tierra disminuiría aún más.
* En algún momento, la pelota estaría tan lejos de la Tierra que el tirón gravitacional de otros cuerpos celestes sería más fuerte. Esta es la razón por la cual una nave espacial que orbita el sol no se tira de regreso a la tierra.
Entonces, la respuesta es:
* Teóricamente:No, la gravedad nunca alcanza cero.
* Prácticamente:Sí, la gravedad se vuelve insignificante a distancias extremadamente grandes, esencialmente alcanzando cero para todos los efectos prácticos.
Es importante tener en cuenta que estas son explicaciones simplificadas. El comportamiento real de la gravedad es mucho más complejo, especialmente cuando se considera la teoría de la relatividad general de Einstein. Pero para la comprensión diaria, la explicación anterior es suficiente.