* Fricción reducida: Las superficies secas tienen un coeficiente de fricción más alto. Esto significa que hay una mayor resistencia al movimiento entre la superficie y sus zapatos. El agua actúa como un lubricante, reduciendo la fricción entre sus zapatos y el piso.
* Película de agua: Cuando una superficie está húmeda, se forma una película delgada de agua entre los zapatos y el piso. Esta película reduce el área de contacto entre las dos superficies, disminuyendo aún más la fricción.
* Tensión superficial: Las moléculas de agua tienen una fuerte atracción entre sí (cohesión). Esto crea tensión superficial, lo que puede dificultar que sus zapatos agarren la superficie húmeda.
En términos simples: Imagina tratar de caminar sobre una hoja de hielo. El hielo es resbaladizo porque hay una capa muy delgada de agua entre sus zapatos y el hielo, lo que reduce significativamente la fricción. Los pisos húmedos son similares, pero no tan resbaladizos.