2. Cambios de temperatura :La meteorización puede ocurrir debido a cambios significativos de temperatura, especialmente en desiertos y climas fríos. Cuando las rocas se calientan durante el día, se expanden y provocan que su capa exterior se rompa. Por la noche, las temperaturas bajan y las rocas se contraen, debilitándolas aún más. Este proceso, conocido como estrés térmico, conduce a la eventual desintegración de las rocas.
3. Acción de Escarcha :En regiones más frías, el agua puede filtrarse en las grietas y poros de las rocas. Cuando la temperatura desciende por debajo del punto de congelación, esta agua se congela y se expande, generando una presión considerable que hace que las rocas se partan y rompan. A medida que las temperaturas fluctúan, el proceso se repite, rompiendo la roca en fragmentos más pequeños.
4. Actividad biológica :Los organismos vivos también pueden desempeñar un papel en la meteorización mecánica. Las raíces de las plantas pueden penetrar las grietas de las rocas, ejerciendo presión y provocando que la roca se rompa. Los animales pueden contribuir a la erosión excavando y excavando, exponiendo las rocas a factores atmosféricos.
5. Crecimiento de cristales :En determinados ambientes, las sales o minerales pueden cristalizar dentro de las grietas de las rocas. A medida que estos cristales crecen, ejercen fuerza sobre la roca, provocando su erosión mecánica.
6. Abrasión :Cuando las rocas se someten a la acción de trituración y rayado de otros materiales, se produce una erosión mecánica por abrasión. Esto puede ser causado por partículas de arena y polvo arrastradas por el viento, agua que fluye o incluso el movimiento del hielo y la nieve sobre las superficies rocosas.