Lanzada en 2018, la sonda solar Parker es una misión de la NASA diseñada para estudiar la atmósfera exterior del Sol, conocida como corona, y los mecanismos detrás de su calentamiento y aceleración del viento solar. La sonda utiliza una combinación de asistencia gravitacional de Venus y presión de radiación solar para alcanzar velocidades extremadamente altas a medida que se acerca al Sol.
Durante su octavo acercamiento al Sol, la sonda solar Parker rompió su propio récord de velocidad más rápida alcanzada por una nave espacial construida por el hombre. La nave espacial alcanzó una velocidad de aproximadamente 213.200 millas por hora (343.000 kilómetros por hora) cuando pasó a 8,5 millones de millas (13,7 millones de kilómetros) de la superficie del Sol.
Las altas velocidades alcanzadas por Parker Solar Probe son esenciales para sus objetivos científicos. Al viajar a estas velocidades, la nave espacial puede acercarse lo suficiente al Sol para estudiar la corona con un detalle sin precedentes y obtener información sobre los procesos fundamentales que dan forma al comportamiento del Sol y su influencia en la heliosfera.