La fracturación puede ocurrir en una variedad de escalas de tiempo:
- En algunos casos, se pueden formar fracturas durante eventos rápidos como terremotos, donde las rocas pueden fallar en segundos o minutos.
- En otros casos, las fracturas pueden desarrollarse en escalas de tiempo geológicas de miles o millones de años debido a la acumulación gradual de tensión dentro de la corteza terrestre y la influencia de los procesos de meteorización.
Además, el tamaño, la complejidad y las características de la fractura en sí pueden afectar la velocidad de su formación. Las fracturas más pequeñas y simples pueden formarse más rápidamente, mientras que las redes de fracturas extensas y complejas pueden tardar más en desarrollarse.
Por lo tanto, es un desafío generalizar el tiempo que tarda en formarse una fractura natural. La estimación depende en gran medida del contexto geológico y de las condiciones específicas presentes en el sitio de desarrollo de la fractura.