El magnetismo es una propiedad fundamental de los materiales que surge del espín de los electrones. En un material magnético, los espines de los electrones están alineados en una dirección particular, creando un campo magnético. La fuerza y dirección del campo magnético dependen del número de espines alineados y de su orientación.
Una forma de cambiar las propiedades magnéticas de un material es aplicar presión. La presión puede cambiar la distancia entre los átomos y las moléculas, lo que a su vez puede cambiar las interacciones entre los espines de los electrones. Esto puede provocar cambios en la fuerza y dirección del campo magnético.
En su estudio, los investigadores utilizaron una técnica llamada "celda de yunque de diamante" para aplicar presión a un material magnético. La celda de yunque de diamante consta de dos yunques de diamante opuestos que se utilizan para comprimir una pequeña muestra del material. Los investigadores utilizaron una fuente de rayos X sincrotrón en el ALS para investigar las propiedades magnéticas del material bajo presión.
Los investigadores descubrieron que las propiedades magnéticas del material cambiaban significativamente bajo presión. Pudieron ajustar continuamente las propiedades magnéticas del material variando la presión. Esto demuestra que la presión se puede utilizar para controlar activamente las propiedades magnéticas de los materiales.
La capacidad de cambiar activamente las propiedades magnéticas de los materiales tiene implicaciones importantes para el desarrollo de nuevos materiales con propiedades magnéticas sintonizables. Dichos materiales podrían usarse en una variedad de aplicaciones, incluidos sensores magnéticos, actuadores y dispositivos de memoria. Los investigadores creen que sus hallazgos podrían abrir nuevas vías para el diseño y desarrollo de materiales magnéticos avanzados.