Oklahoma ocupa 69,898 millas cuadradas en las fronteras de Texas, Nuevo México, Arkansas, Missouri, Kansas y Colorado. Su población a partir de 2013 era de aproximadamente 3,85 millones de personas. La topografía de Oklahoma pasa de las altas llanuras occidentales a los humedales del sudeste, lo que la convierte en uno de los estados geográficamente más diversos. El estado enfrenta problemas ambientales relacionados con la calidad del aire y del agua, la sequía crónica y las amenazas planteadas por el fracking.
Calidad del agua
Un informe de 2013 del Sierra Club identificó seis centrales eléctricas de carbón en Oklahoma que acusó de descargar cenizas de carbón dañinas y depurar aguas residuales en los ríos del estado. Los materiales descargados pueden contener sustancias tóxicas, como arsénico, selenio y mercurio. Los seis servicios públicos negaron los cargos. Otro problema de la calidad del agua en el estado involucra la contaminación presuntamente causada por el fracking, un proceso donde la roca se fractura con líquido presurizado para ayudar a extraer combustibles fósiles. En 2013, los residentes del condado de LeFlore iniciaron una demanda colectiva contra 50 compañías, alegando que las aguas residuales fracking crean una amenaza para la salud. La demanda estaba en curso a partir de la fecha de publicación de este artículo.
Fracking y Earthquakes
Más allá de las preocupaciones sobre la contaminación del agua, el fracking plantea la preocupación de que pueda generar terremotos. El Dr. Austin Holland, un sismólogo del Servicio Geológico de Oklahoma, ha notado un aumento dramático en el tamaño y la frecuencia de los terremotos en las regiones donde se produce el fracking. Él señala que sería una coincidencia altamente improbable que el aumento de la actividad sísmica no esté relacionado con el fracking y está llevando a cabo pruebas para investigar el vínculo con mayor detalle. Oklahoma tuvo más de 238 terremotos en 2013, en comparación con solo 20 en 2009.
Sequías perennes
El aumento de las temperaturas y el aumento de la producción agrícola crean una demanda cada vez mayor de agua en Oklahoma, un estado con una historia de sequía prolongada. El Dr. Yang Hong de la Universidad de Oklahoma pronostica que las sequías futuras serán más frecuentes y durarán más. La parte sureste de Oklahoma tiene suficiente agua, pero hay una falta de infraestructura para que el excedente de agua se seque en el oeste de Oklahoma. Las ciudades grandes y pequeñas enfrentan los costos de reparación de tuberías, bombas y equipos de tratamiento de agua que se desmoronan. En 2012, el estado aprobó la Ley de Agua para 2060 con el objetivo de no consumir más agua dulce en ese año de lo que usó en 2012.
Contaminación del aire
De acuerdo con la American Lung Society, Oklahoma City y Tulsa se encuentran entre las 25 ciudades estadounidenses con los niveles más altos de contaminación por ozono. La ciudad de Ponca en Oklahoma ha recibido notoriedad porque su aire contiene altos niveles de negro de humo, un fino polvo negro producido por la cercana planta de Continental Carbon Co. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades aconsejan que la exposición prolongada al negro de carbón puede dañar el corazón y los pulmones. Después de años de demandas, la compañía compró y eliminó las propiedades residenciales de la ciudad.