La pandemia de COVID-19 ha causado importantes perturbaciones en la educación, lo que ha obligado a los educadores a realizar una rápida transición a las plataformas de aprendizaje en línea. Como resultado, ha habido un mayor énfasis en la utilización de la tecnología en la enseñanza. Los futuros profesores pueden beneficiarse de esta experiencia adaptando las técnicas adquiridas durante el aprendizaje remoto a entornos de aula tradicionales.
El papel de la realidad virtual y la IA en la preparación docente
La Realidad Virtual (VR) y la Inteligencia Artificial (IA) han surgido como posibles soluciones a los desafíos planteados por la pandemia. La realidad virtual puede facilitar entornos de enseñanza inmersivos para que los futuros profesores practiquen su oficio. La retroalimentación impulsada por la IA sobre el desempeño docente también permite a los futuros educadores perfeccionar sus habilidades.
El auge de la microenseñanza
La microenseñanza, un método que implica sesiones de práctica enfocadas y de corta duración, ha ganado fuerza durante la pandemia. Ofrece a los futuros profesores oportunidades para perfeccionar sus técnicas de enseñanza con retroalimentación inmediata.
Programas de tutoría virtual
Debido a las restricciones a la interacción en persona, los programas de tutoría virtual se han convertido en una vía común para que los educadores experimentados guíen a los futuros docentes. Estos programas suelen emplear videoconferencias para sesiones en vivo y comentarios.
Colaboración e intercambio de recursos
La pandemia ha alentado a los educadores a colaborar y compartir recursos. Esta cultura puede impactar positivamente a los futuros docentes, ya que podrán intercambiar conocimientos y técnicas innovadoras con sus compañeros.