* Absorción: Los materiales de la casa (paredes, techo, ventanas) absorben parte de la energía radiante. Esta absorción hace que las moléculas dentro de los materiales vibren más rápido, lo que lleva a un aumento en su temperatura.
* Transmisión: Alguna energía radiante pasa a través de los materiales de la casa, especialmente si son transparentes como las ventanas. Esta energía transmitida puede calentar objetos y aire dentro de la casa.
* Reflexión: Una porción de la energía radiante se refleja lejos de la casa. Esto no aumenta directamente la temperatura de la casa, pero juega un papel en la cantidad de energía que finalmente se absorbe.
Factores que afectan el aumento de la temperatura:
* Propiedades del material: Diferentes materiales absorben y reflejan la energía radiante de manera diferente. Los colores más oscuros absorben más, mientras que los colores más claros se reflejan más.
* Ángulo de incidencia: El ángulo en el que la energía radiante golpea la casa afecta la cantidad de energía que se absorbe.
* Cantidad de radiación: La intensidad de la energía radiante (por ejemplo, cuán brillante es el sol) determina cuánta energía se absorbe.
En resumen: La temperatura de una casa aumentará a medida que absorba la energía radiante, pero la magnitud del aumento depende de varios factores.