1. Portabilidad: Las baterías son relativamente pequeñas y livianas, lo que las hace ideales para impulsar dispositivos que necesitan ser móviles, como computadoras portátiles, teléfonos inteligentes y vehículos eléctricos. Esto contrasta con otras fuentes de energía, como los combustibles fósiles, que son voluminosos y difíciles de transportar.
2. Energía limpia: A diferencia de los combustibles fósiles, las baterías no producen emisiones durante el uso. Esto los convierte en una fuente de energía más sostenible, especialmente cuando se combinan con fuentes de energía renovables como la energía solar y eólica.