1. luz solar: Esta es la última fuente de energía para la mayoría de la vida en la Tierra. Las plantas y otros organismos fotosintéticos capturan la luz solar y la convierten en energía química en forma de azúcares a través del proceso de fotosíntesis. Esta energía almacenada se transmite a otros organismos a través de la cadena alimentaria.
2. Energía química: Esta es la energía almacenada dentro de los enlaces de las moléculas, como carbohidratos, grasas y proteínas. Los organismos obtienen esta energía química consumiendo otros organismos (heterotrofos) o descomponiendo moléculas orgánicas (por ejemplo, quimiosíntesis).
Si bien la luz solar es la fuente definitiva para la mayor parte de la vida, algunos organismos, particularmente aquellos que viven en respiraderos de aguas profundas u otros ambientes extremos, obtienen energía de reacciones químicas que involucran compuestos inorgánicos como sulfuro de hidrógeno o metano. Esto se conoce como quimiosíntesis.