* suministro finito: Los recursos energéticos no renovables se forman durante millones de años a partir de los procesos geológicos. Existen en cantidades limitadas y no pueden reponerse a una tasa comparable a su consumo.
* Los combustibles fósiles son el ejemplo principal: Los recursos no renovables más destacados son los combustibles fósiles, que incluyen carbón, petróleo y gas natural. Estos se formaron a partir de la antigua materia orgánica sobre eones.
* Impactos ambientales: La quema de combustibles fósiles libera gases de efecto invernadero, contribuyendo al cambio climático. La extracción y el procesamiento de estos recursos también pueden conducir a la contaminación, la destrucción del hábitat y otros problemas ambientales.
* Disponibilidad limitada: A medida que continuamos utilizando estos recursos, se vuelven más escasos, lo que lleva a aumentos potenciales de precios y conflictos de recursos.
* Dependencia de la tecnología: La extracción, el procesamiento y el uso de recursos energéticos no renovables se basan en tecnologías e infraestructura complejas.
* Sostenibilidad limitada: Su naturaleza finita los hace insostenibles a largo plazo.
En resumen: Los recursos energéticos no renovables son esenciales para nuestro sistema energético actual, pero presentan desafíos ambientales y de sostenibilidad significativos.