* Los cambios en el estado físico requieren superar las fuerzas intermoleculares. Las fases sólidas, líquidas y de gas se definen por la resistencia de las fuerzas entre las moléculas. Para la transición entre los estados, estas fuerzas deben ser superadas.
* Se requiere energía para superar estas fuerzas. Calentar un objeto proporciona la energía para romper los enlaces y debilitar las fuerzas intermoleculares, causando una transición de sólido a líquido (fusión) o líquido a gas (ebullición). Por el contrario, el enfriamiento libera energía, permitiendo que las moléculas disminuyan la velocidad y formen enlaces más fuertes, lo que lleva a la condensación (gas a líquido) o congelación (líquido a sólido).
Ejemplos:
* ICE DE MEDIDO: El hielo absorbe la energía térmica de su entorno, rompiendo los enlaces de hidrógeno que sostienen las moléculas de agua en una red rígida, la transición al agua líquida.
* agua hirviendo: El agua absorbe la energía térmica, aumentando la energía cinética de las moléculas de agua, lo que les permite superar las fuerzas intermoleculares y escapar al estado gaseoso como vapor.
Conclusión:
Un cambio en el estado físico siempre implica un cambio en el contenido de energía del objeto. Si bien puede parecer que ocurren algunos cambios sin transferencia de energía (como un cambio sólido a un líquido a una temperatura específica), esto se debe a que la energía necesaria para el cambio de fase proviene del entorno circundante, no directamente de una fuente externa.