1. Energía química a la energía térmica: El combustible, que almacena energía química en sus enlaces, sufre combustión. Este proceso de ardor libera la energía química como calor, elevando la temperatura de la cámara de combustión.
2. Energía térmica a energía mecánica: La energía térmica del proceso de combustión expande los gases en el cilindro, empujando un pistón. Este movimiento se convierte en energía mecánica, lo que impulsa el cigüeñal y finalmente alimenta el vehículo.
3. Energía mecánica a la energía cinética: El cigüeñal giratorio transmite la energía mecánica a las ruedas, lo que hace que gire y impulsen el vehículo hacia adelante. Esta rotación es la energía cinética del vehículo.
En resumen:
Energía química (combustible) → energía térmica (combustión) → energía mecánica (movimiento del pistón) → energía cinética (movimiento del vehículo)
Es importante tener en cuenta que se pierde cierta energía como calor residual durante el proceso, por lo que los motores no son 100% eficientes.