* Temperatura: Utilizamos termómetros para medir la temperatura de una sustancia. La temperatura es una medida de la energía cinética promedio de las partículas dentro de una sustancia. La energía térmica hace que estas partículas se muevan más rápido, lo que lleva a una temperatura más alta.
* Expansión: Muchas sustancias se expanden cuando se calientan. Podemos medir esta expansión utilizando dispositivos como tiras bimetálicas o cilindros graduados.
* Cambio de estado: La energía térmica puede hacer que una sustancia cambie de estado de sólido a líquido (fusión) o de líquido a gas (ebullición). La cantidad de calor requerida para estos cambios es una medida de la energía térmica absorbida.
* Reacciones químicas: Algunas reacciones químicas liberan o absorben energía térmica. Podemos medir este cambio de calor utilizando calorímetros.
En resumen: No tenemos una forma directa de medir la energía térmica en sí. En cambio, medimos sus efectos en la materia, como los cambios de temperatura, la expansión, los cambios de estado y las reacciones químicas.