1. Calor residual de la formación de la Tierra:
- Cuando se formó la tierra, era una masa giratoria de roca fundida y metal.
- A medida que la tierra se enfriaba, los elementos más pesados (como el hierro y el níquel) se hundieron hasta el núcleo, liberando la energía gravitacional.
- Esta energía continúa generando calor, manteniendo el núcleo de la Tierra a una temperatura abrasadora estimada en alrededor de 5,200 ° C (9,392 ° F).
2. Decadencia radiactiva:
- Los isótopos radiactivos como el uranio, el torio y el potasio están presentes dentro del manto y la corteza de la Tierra.
- Estos isótopos experimentan una descomposición radiactiva, liberando el calor como subproducto.
- Este proceso contribuye significativamente al calor interno de la Tierra.
Cómo el calor llega a la superficie:
- El calor del núcleo y el manto de la tierra viaja hacia afuera a través de un proceso llamado conducción , Transferencia de calor a través del contacto directo entre moléculas.
- Este calor también se puede transferir a través de la convección , donde el material caliente y menos denso se eleva y se enfría, el material más denso se hunde, creando un ciclo de transferencia de calor.
- En áreas donde la corteza terrestre es delgada o fracturada, este calor puede elevarse más cerca de la superficie, creando puntos de acceso geotérmicos .
Utilización de energía geotérmica:
- La energía geotérmica aprovecha este calor perforando pozos en depósitos geotérmicos, donde el agua o el vapor se calientan por el calor interno de la Tierra.
- Este vapor o agua caliente se puede usar directamente para calefacción o generación de electricidad.
En esencia, la energía geotérmica es una fuente de energía sostenible y renovable que aprovecha el calor interno de la Tierra, proporcionando una alternativa limpia y confiable a los combustibles fósiles.