1. Los combustibles fósiles no se forman directamente a partir de la luz. Se forman a partir de los restos de organismos antiguos, principalmente plantas. Si bien estas plantas usaron la luz solar para la fotosíntesis, la energía química almacenada en su biomasa no es directamente equivalente a la energía de la luz.
2. Los combustibles fósiles almacenan energía química, no energía de la luz. Los enlaces químicos dentro de los hidrocarburos en los combustibles fósiles tienen el potencial de liberación de energía cuando se queman. Esta es energía química, no la energía de los fotones (luz).
3. La energía de la luz es una forma de radiación electromagnética, no de energía química. Mientras que la fotosíntesis convierte la energía de la luz en energía química, la energía almacenada en los combustibles fósiles no está en forma de fotones. Se almacena dentro de los enlaces químicos de las moléculas.
En resumen: Los combustibles fósiles son tiendas de energía química derivadas de los restos fosilizados de organismos antiguos. Si bien estos organismos usaban la luz solar para la fotosíntesis, la energía almacenada en los combustibles no es directamente energía ligera.