Los globos aerostáticos se basan en el principio de flotabilidad:el aire caliente dentro del globo es menos denso que el aire más frío del exterior, lo que crea una fuerza de flotación ascendente que hace que el globo se eleve. Para generar este aire caliente, los globos aerostáticos utilizan un quemador de propano o una fuente similar de calor, en lugar de electricidad. La electricidad no es adecuada para este fin, ya que no produce directamente el aire caliente necesario.