Una de las principales ventajas de la energía eólica es que es una fuente de energía limpia y renovable. La energía eólica no produce emisiones directas, como gases de efecto invernadero o contaminantes atmosféricos, durante su funcionamiento. Esto convierte a la energía eólica en una alternativa sostenible y respetuosa con el medio ambiente a los combustibles fósiles, como el carbón y el gas natural. Mientras el mundo enfrenta los desafíos del cambio climático y la contaminación del aire, la energía eólica desempeña un papel crucial en la reducción de la dependencia de fuentes de energía no renovables y la mitigación de los impactos ambientales.